«“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser y con toda tu mente” —le respondió Jesús—. Este es el primero y el más importante de los mandamientos. El segundo se parece a este: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. De estos dos mandamientos dependen toda la ley y los profetas.» Mateo 22.37-40
Jesús nos enseña que el nexo entro uno y el otro es el amor. Pero ¿Qué clase de amor? Porque probablemente vivamos el amor, y amemos a los demás a nuestra manera. Como lo hemos aprendido según nuestra propia experiencia. Y muchas veces, amamos de manera egoísta o limitada, y nos justificamos en nuestra historia para hacerlo. Solemos relacionar el amor siempre con los sentimientos.
El amar no es “A MI MANERA” porque a veces aun con buenas intenciones podemos lastimar a otros. Por eso, a mi manera no es la manera correcta de amar.
Jesús nos enseña a amar a la manera de Dios.
El amor no pueden quedar solo en mi idea, necesita de palabras intencionadas correctamente. Pero aun así, el amor no son solo palabras, el amor también son ACCIONES, acciones que sobrepasan una acción física.
En 1 Corintios 13.4 encontramos la definición correcta del amor que DIOS establece.
El amor es ser paciente. CONSTANTEMENTE PACIENTE, (como la paciencia con la que Dios nos ama), es bondadoso, no piensa en sí mismo, no es orgulloso, no se enoja fácilmente ni guarda rencor. El amor todo lo cree! No me habla de un amor ingenuo, sino lque QUIEN AMA PUEDE VER ESPERANZA EN EL OTRO Y CREER POR EN EL MAS ALLÁ DE SU PRESENTE. Estas son las acciones que tenemos en cuenta cuando hablamos de AMOR!
EL AMOR A LA MANERA DE DIOS ES EMPATÍA
«El Rey les responderá: “Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de mis hermanos, aun por el más pequeño, lo hicieron por mí”.» Mateo 25.31
En esta enseñanza, Jesús no nos esta diciendo que hagamos algo por alguien con el fin de obtener su aprobación, porque eso no seria pensar en el OTRO. Al contrario, nos enseña que cuando alguien sufre, JESÚS MISMO SUFRE CON ÉL. Y ese corazón es el que el Señor quiere inspirarnos. Un corazón que sufre con el que sufre. QUE AMA CON EMPATIA.
Lucas 7.11 EL CORAZON DE JESÚS SE ROMPE AL VER NUESTRO DOLOR, y esa empatía lo movió a dar su vida para que vivamos con Él. Hoy no solo queremos disfrutar de la vida y la libertad que Jesús nos regala, queremos mover nuestro corazón a sentir lo que JESÚS siente por OTROS.
JESÚS QUIERE MOVER NUESTRO CORAZÓN A SENTIR LO QUE OTROS SIENTEN
REFLEXIÓN
¿ESTOY VIVIENDO EL AMOR DE MANERA CORRECTA? El amor a nuestra manera no es amor. La verdadera definición de amor la descubrimos en JESÚS.
¿ESTOY AMANDO CON ACCIONES? El amor no es solo actos concretos, amar es tener paciencia, perdonar y creer en el otro aun cuando no vemos lo que esperamos.
¿ESTOY PONIENDO SIENDO EMPATIZO EN MI FORMA DE AMAR? Amar a la manera de Dios es mover nuestro corazón al corazón del otro. Sufrir con el que sufre y acompañarlo a salir de su dolor.
Que esta semana nuestros corazones puedan moverse a sentir lo que JESÚS siente por otros. Y recordá que “OTROS” podes ser vos!