«Les aseguro que el que cree en mí también hará las obras que yo hago y aun las hará mayores, porque yo vuelvo al Padre. 13 Cualquier cosa que ustedes pidan en mi nombre, yo la haré; así será glorificado el Padre en el Hijo. 14 Lo que pidan en mi nombre, yo lo haré.» Juan 14.12-14.

Hace un tiempo ocurrió algo muy llamativo en un centro comercial. El personal de seguridad retiene a dos personas asegurando que una de ellas le había robado. Una era una mujer elegantemente vestida y el otro un joven con apariencia común y corriente. En cuestión de segundos un gran número de personas rodeo la escena para saber que había sucedido, y aunque no tenían idea de lo que había pasado cada uno tomaba partido acusando a uno u otro. Esto me llevo a pensar: ¿qué hay detrás de nuestras creencias? ¿Qué ideas llevaron a estas personas a asumir a uno o al otro culpable?

A lo largo de la vida hemos ido acumulando argumentos basados en vivencias, decepciones, conversaciones, tradiciones, etc. Lo curioso es que gran parte de lo que creemos los seres humanos no lo hemos vivido en persona, sino que nos lo ha contado otro. Pero esto termina condicionando la manera en la que vemos el mundo y analizamos la realidad que nos rodea. 

Hoy muchas personas están decepcionadas por haber creído en algo que no era verdadero. Por eso la sociedad está tan dolida, descreída y enferma. Los discípulos también se sintieron confundidos, sin saber a donde ir, pero en medio de la incertidumbre Jesús les recuerda que él es el CAMINO, que solo él nos conduce hasta Dios. Y hoy nos invita a nosotros a correr nuestra mirada de lo temporal para poder mirarlo a Él (Juan 14.6-7).

En medio de un mundo lleno de mentira, y falsas ilusiones. Donde todos nos ofrecen algo terrenal que solo trae más decepción y frustración, Jesús irrumpe hablándonos VERDAD. Sus palabras de vida eterna traen seguridad a nuestro corazón, y nos llevan a caminar por encima de cualquier dificultad. No nos promete que no habrá dificultades, JESÚS SIEMPRE NOS HABLA CON LA VERDAD, pero nos afirma que en Él estamos seguros (Juan 14.2-4).

Hoy Jesús nos invita a conocerle y experimentar en nuestras vidas cosas mayores, que superan cualquier razonamiento humano (Juan 14:12-14).

Hay más de Dios para tu vida. Hoy podemos decirle basta al temor y la decepción y comenzar a vivir esas cosas mayores que Dios tiene para nosotros.

Pedir algo en “su nombre” nos habla de tener un mismo pensar y sentir con Jesús. Y estas obras mayores que Él nos promete vivir tienen un mismo fin, que otros conozcan a Jesús y experimenten el poder de Dios.

JESÚS NOS PROMETE QUE SU ESPÍRITU SANTO ESTÁ CON NOSOTROS Y NOS AYUDA A AVANZAR FIJANDO NUESTRA MIRADA EN ÉL.

REFLEXIÓN:

¿EN QUÉ ESTA BASADA MI FE Y MI MANERA DE ATRAVESAR LA VIDA? Mucho tiempo creímos en lo que otros nos contaron y forjaron en nosotros. Pero hoy podemos experimentar el poder de Dios por nosotros mismos.

¿A DÓNDE VOY ANTE LA INCERTIDUMBRE Y LOS DESAFÍOS? Jesús nos recuerda que Él es el camino, nos habla con verdad y trae seguridad a nuestras vidas de que Él siempre estará con nosotros.

¿ESTOY DEJANDO QUE LAS DECEPCIONES ME LIMITEN? Jesús nos invita a conocerle personalmente y experimentar cosas mayores en nuestras vidas. Esas cosas mayores no son solo para nosotros, sino para que otros puedan descubrir a Dios por medio nuestro.